El poeta Gustavo Adolfo Garcés
Crear en Salamanca tiene la satisfacción de publicar siete poemas de Gustavo Adolfo Garcés (Medellín, 1957). Premio Nacional de Poesía Colcultura en 1992. Abogado de la Universidad de Antioquia y Magister en Ciencias Políticas de la Universidad Javeriana. Se ha desempeñado como profesor de Literatura y Ciencias Políticas en varias universidades y como asesor de la Procuraduría Delegada para la Prevención en Materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos. Ha publicado los siguientes poemarios: Libro de poemas (1987), Breves días (1992), Pequeño reino (1998), Espacios en blanco (Universidad de Antioquia, 2000), Libreta de apuntes (Universidad Externado de Colombia, 2006), Hasta el fin de los números (Universidad Nacional de Colombia, 2012) y Una palabra cada día (2015)
BELCHITE
El herrero
tiene buen
corazón
a ratos
maldice
son
muchos años
en la forja
disfruta
el bullicio
de la vida
una mujer
le sonríe
y entonces
los ojos
le brillan
de regocijo
pura
embriaguez
ODA
Julián
del Casal
camina
hasta
la peña
mira
la luz
de sus
muertos
bendice
la vida
escucha
la urdimbre
de rumores
no yerres
pájaro
dice
para sí
Raymond Carver
RAYMOND CARVER
La
enfermera
del asilo
visita
el aserrío
se toma
su tiempo
en hacer
nada
huele
puñados
de viruta
se va
sin despedirse
Foto de José Amador Martín
FOTO
Detrás
de ti
las escalas
de la iglesia
estás
descalza
hay
hierba
en la calle
empedrada
debe ser
tu madre
la mujer
con sombrilla
El sastre, del mexicano José Miguel Bayro
EL SASTRE
Va
hasta
el puente
de piedra
a recibir
la brisa
el oficio
y el
paseo
habitual
los heredó
de su padre
“ayuda
al alma
dejar
vagar
la mente
y te quita
todo
el polvo
de encima”
Piedad de la Guerra – War Pieta, de Max Grimburg
GUERRA
Cómo
nombrar
los muertos
tantos
nombres
tanto
duelo
lo que
se va
lo que
se pierde
un funeral
y otro
y otro
Pintura del colombiano Jairo Buesaquillo
ALDEANO
El poeta
de estos
pagos
cría vacas
muchos
tienen voz
en sus
historias
mientras
despluma
una gallina
cuenta cómo
su pueblo
se fue
a pique
sonríe
al saber
que es
el personaje
de estos
versos
Wallace Stevens
WALLACE STEVENS
Le gusta
husmear
dice
su biógrafo
glosa
matices
los ojos
siempre
en las
palabras
las que
zumban
y las que
retumban
camina
por
el sendero
de las moras
hasta
la charca
de los ciervos
acude
a lo que
murmura
en pantuflas
CINCO APUNTES SOBRE LA POESÍA DE GUSTAVO ADOLFO GARCÉS
“La poesía de Garcés trata de llegar a un límite a partir del cual las palabras no alcanzan y sólo queda la posibilidad de invitar a mirar detrás de ellas y a oír el silencio. En ello hay algo que acompaña a toda poesía digna de ser releída escrita desde comienzos del siglo XX y es una desconfianza visceral ante las palabras”. Rodrigo Zuleta. Crítico colombiano.
“Ni fácil moralismo, ni decoración, ni sentimentalismo. Visión pura, visión verbal, música del sentido. Estos breves versos apelan al canto interno, no a la música que conocemos, sino a una música que se descubre en el sentido mismo de las cosas que nombra. No se trata de una interiorización de aquello que llamamos “lirismo”. Es una búsqueda de una música detrás de la música: poema pulverizado. Por eso el gusto por los fragmentos, las partículas de la frase, los trozos léxicos, las astillas lingüísticas». Jorge Cadavid, poeta y profesor colombiano en la Universidad Javeriana de Bogotá.
“Enseñanza mayor: alejamiento del palabreo conocido, entrada en el reino de la exactitud. […] Garcés continúa en la línea de oposición a la verborrea y se nos muestra devoto de lo minucioso. Y tiene otras cercanías: William Carlos Williams y los objetivistas estadounidenses, José Manuel Arango, Pacheco, Creeley, Ungaretti, la poesía japonesa y china…” Edgar O’Hara, crítico peruano y profesor en Washington University.
“Los temas van y vienen sin preocuparse de la unidad. Los une el aire de la risa, del humor, de la amistad. Los une el abrazo de una hermosa desnudez. Qué lejos está todo esto de la literatura, qué cerca de la poesía”. Luis Germán Sierra, poeta y crítico colombiano.
“En la poesía de Gustavo Adolfo Garcés comprobamos que menos es más, que el mestizaje entre oriente y occidente (entre el hayku clásico y la poesía breve a la manera de Emily Dickinson o las cuartetas de Machado) permite el brote de versos pulidos, plenos de lumbre y sentido, a hombros de la poderosa realidad sin renunciar al inquebrantable candor de la mirada. Garcés no ofrece oriflamas sino voz última, raíz y no follaje: lo suyo crece y crece, y no por mera casualidad. Tras leerlo ya tenemos lo que no teníamos”. Alfredo Pérez Alencart, poeta peruano-salmantino y profesor de la Universidad de Salamanca
agosto 15, 2017
Felitaciones.
Como la palabra existe sobre los hechos y anula lo pasajero para ser esencia.
Gracias Poeta
septiembre 11, 2017
He contemplado la noche atravesada por la luz de unos versos.
He visto el pájaro melódico volar al horizonte con sus sílabas de viento.
He sentido el corazón del mundo abrazando la unidad del verso.
He sentido el universo.