El poeta Arturo Bolaños Martínez
Crear en Salamanca tiene el privilegio de publicar una selección de textos del poeta colombiano Arturo Bolaños Martínez (Alto Rosal del Monte, Pasto, 1964). Autor de obras de historia local (Primer premio de ensayo histórico de la Universidad de Nariño y Academia de Historia, 1991) y catálogos documentales de historia colombiana. En poesía ha publicado Desde Una Orilla Distinta (1991), Granos de Voz (1992), Al Sur de la Poesía (1993), Sur-co de Voz (Primer Premio de Poesía Aurelio Arturo, 1997), Sabor a Ceniza (2001, 2ª ed.) y Ufano Aliento (2016). Poemas y cuentos suyos figuran en varias antologías, como Quien es Quien en la Poesía Colombiana (Colcultura, Bogotá, 1999) y Cuentos y Relatos de la Literatura Colombiana (F.C.E., Bogotá, 2005). Máster en Historia Moderna y Contemporánea de la Universidad Autónoma de Barcelona, y doctor en Historia Comparada del Instituto de Historia Vicent i Vives (Universidad Pompeu Fabra).
Bolaños Martínez participó en el Encuentro de Poetas Iberoamericanos, celebrado en Salamanca el año 2009. Acaba de publicar en Bogotá, y bajo el sello de Común Presencia, su poemario ‘Ufano aliento’.
PALABRA
Palabra
presencia del tiempo
vapor de la lengua
gota que alumbra
entre la llama viva
del alma.
CADA HOJA
El acto del viento que mece sombras y árboles
la polilla que pisa el cristal
la gota de la teja sobre la piedra en el andén
el hondo olor a menta
Hay una luna recostada en el armario
una brisa fría y sola
el paso metálico de un potro nocturno
Declaro mis años de verde –azul Andes
y templado perfil de maíz
ahí donde ríe la chorrera
Cada hoja
inventa otro mapa sobre el camino
donde mis pies dejan su polvo.
SOY HIJO
Soy hijo de la montaña
preñada por el cóndor
soy maíz
agua de páramo me recorre
vapor de luz al atardecer
donde la luna crece
***
Madre del agua
destilas saliva de montaña
en la copa aurora que bebo
costado virgen
luz y gota.
***
Al vuelo del colibrí
qué responderá la flor?
***
El alero húmedo de rocío
el aleteo circular del colibrí
la mañana que golpea la ventana
esa sombra de nube que pasa cada día
por el borde del huerto
esa música de aguamanil de barro
que llena el chorro
Crecen los días
con aroma de geranio
donde la huella de arcilla queda
Rancho
paja
velita
flor nocturna en la montaña.
HE VISTO
Desde niño he visto
sacrificios de hombres
y de árboles
Su sangresavia llena mis ojos
Hoy otra vez
más han muerto
han caído
talados
De regreso a casa
me cruzo con ellos
veo sus rostros
y sus ramas
No pregunto sus nombres
ni sus edades
Mañana serán otros los que caigan
¿Qué sentido tienen
la lágrima
el pájaro?
EL PÁJARO
Huye el pájaro
del árbol seco
Se contiene en los jirones del aire
en las entrañas de la tarde
en el parpadeo del vuelo
La telaraña de oquedades
atrapa los nidos
donde se hace visible
todo lo perdido
El tiempo otorga la verdad al ave migratoria
del árbol quebradizo de la vida.
AMÉRICA
Región de muchos vientos
nido verde
música de alas en vuelo
mariposa inmensa
parcela de arcilla
mujer desnuda y tibia con pechos de nieve.
ENTIERRO DE LA NADA
No hay más voluntad que la del tiempo
geografía trazada por la brisa
en sus caminos de ida y despedida
los pasos esfumados de la huella
La calavera del mundo me sonríe
la opacidad de sus ojos me revela
la mirada perdida de los días
el fin del festejo de la vida
El tiempo desdibuja los contornos
los filos del drama y la alegría
se cubren de polvo y abandono
de lágrimas y risas las cenizas
Qué milagro perverso se revela con el paso de los días?
Qué suerte de mago se manifiesta en la carne y en la ruina?
Inofensiva memoria que me asiste
al entierro de la nada
al aire aferrándose las llamas.
IMBI
Mas allá de la estera tupida y los sancos de la choza
las venas del páramo fluyen inadvertidas
ocupo abismos donde la mariposa reina
y se refugia el agua
el manto de niebla tibia acoge los senderos
reparte entre las hojas el rocío de la aurora
la montaña suda el pedregoso caminar de la quebrada
el prisma recoge las cimas tras la lluvia
la vaporosa respiración invade los vértices de los pájaros en vuelo
amanece un solo rumor vegetal
todo resplandece.
***
Arde
una gota de páramo
en mi sangre.
***
Dedo
alumbras la estrella
al señalarla.
***
Ojos
bajen los párpados
lo que hay que ver
es invisible.
PIEL DE AGUA Y FUEGO
(fragmentos)
Amarte
agita mis lares.
***
Preciso reconocer
a la hora más alta
los precipicios de tu piel
Vagar por tus esquinas frágiles
y reposar mis labios
en tus vértices profundos.
Aquí
con tu cuerpo
en la vasija sacramental de mis manos
armo de tu piel
las alas que me elevan.
***
Tu cuerpo
manada de potros
veloces
alguno casi desbocado.
Qué decir
de tus senos
y tus caderas
de la humedad
entre los vértices de tu cuerpo?
Qué decir
de tus muslos
y tu espalda
del vientre que sostiene
la grieta de miel
donde yo monto
el potro brioso
que se hunde en tu piel
y recorre en espasmos
la diminuta distancia
entre el lecho y el cielo?
Qué decir del vapor de amor donde nacemos?
***
La piel
el margen más íntimo
***
Paso
entre memoria y olvido
Mujer
dientes de azúcar
tu mordedura
huella
tatuaje
hechizo
tacto viajero
a un lugar invisible.
Para Alejandra
***
En tus ojos
los sueños y deseos
las noches de amor
de laxitud
Y en el fondo de ellos
milagro de la vida
nítida memoria de los días
los niños corriendo por el prado
durmiendo en tu regazo
Miro en tus ojos
los segundos llenos de eternidad.
Manuscrito de Arturo Bolaños
FLOR MARCHITA
Colombia ahí
tirada como charco de sangre
sobre la calle
y la montaña
Y su sol hecho trizas en el tejado
Quién atiende el día
que volaba como Cóndor
sobre la línea ondeante de sus montes
y el pecho del río
y los océanos?
Quién atiende a la flor
que se evapora entre lágrimas
y palabras?
DECIRTE QUÉ?
si las palabras se pegan a la lengua
perforan la piel y caen al piso
ahora te entiendo monje lluvioso
con tus ojos inmóviles como de pescado
ojos audaces que miran fijamente
algún objeto invisible.
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.