La poeta Lucía Catalina
“Crear en Salamanca” publica hoy poemas de Lucía Catalina, poeta burgalesa, inédita en publicaciones, licenciada en
Filología por la Universidad de Salamanca.
Sobre ella misma dice:
Crecí en un pequeño pueblo del sur de Burgos, las largas tardes de invierno y la despoblación del mismo hicieron que empezara a leer (tras mucha insistencia de mi madre y mi hermana). Ahí encontré la compañía, empezó mi aventura. A los 10 años mi primer diario, a los 13 mi primer weblog, pero siempre tendía a autocensurarme, hasta que en 2013 fundé mi blog actual: La cara triste de la luna. Es verdad que he borrado muchas publicaciones, pero siempre he evitado la tentación de eliminarlo. Hoy doy las gracias por no haberlo hecho. Me gusta el arte en general, la poesía es mi espacio de reflexión, un intento por comprender el mundo y al ser humano. Entre versos me he sentido comprendida, me han ayudado a encontrar a personas que pensaban igual que yo mucho antes de haber siquiera nacido. La poesía es una parte más de mi vida y de mi ser.
Lucía Catalina (Foto de Alessandra Adamidou)
POEMAS
No entiendo lo que escribo. Huyo de la poesía y de sus repeticiones modernas. Intento buscar algo nuevo, pero ya está todo dicho. La experiencia se ha agotado y no hay nada que no se haya vivido. Me encuentro de bruces con la mediocridad, en esta cama solitaria que un día compartió sueños de ancianos que se besaban y jugaban al amor como dos tiernos adolescentes. El lenguaje, hoy, no me sirve.
Lo voy llenando todo con mis cosas…
Dejo la carpeta en la cocina,
el móvil en la ventana,
mis ganas en el salón
y la tristeza en el café.
Escribir sobre esto ha vuelto fácil,
incluso, ridículo. Rechazo lo anterior,
por rechazar lo irrechazable
me rechazo a mí misma en estas letras.
Me quedo suspendida en el sonido
del piano que no tocas,
del amor que no quisiste.
¡Crédulo! Estos versos
no son para el que los lee
si no los siente.
¿Y si yo ahora hiciera de mendigo?
Me pusiera en la calle y pidiera
dinero a la gente que pasa a mi vera.
¿Seguiría siendo la misma en esencia?
Quizás, incluso, una versión mejorada de mí,
que hubiese logrado sobrepasar lo mundano y la vergüenza.
¿Y si me quedara aquí sentada?
Sí, pasaría frío.
Sin embargo, aprendería a valorar la calidez de un hogar.
amaría cosas que pasamos por alto en nuestro día a día.
Esos detalles que damos por hecho y que esconden la felicidad.
¿Si decidiera cambiar de vida y olvidarme de todo?
Deshabitar lo habitable,
el pasado, el presente…
¿Sería más feliz?
Quizás…
O igual de triste y marchita,
pero con la sabiduría en los ojos
del que retiene todo el mundo es sus pupilas.
Mesa de café de nuevo,
ya no somos los mismos.
Ahora solo escribo poesía
cuando la estudio
o cuando te odio,
que es lo mismo.
Por primera vez creo
en el azar como triunfo.
Ya no hay grandes escritores,
solo tontos con suerte.
Existen las brujas.
Hay brujas buenas
y brujas…
Existen seres mágicos,
me resisto a creer
que el mundo es un lugar
triste y oscuro.
Hay personas
que te erigen con la mirada,
un sueño, una caricia.
Se encuentran en los momentos
en los que dejaste de creer en la vida.
Aparecen para recordarte
que el amor y la alegría
están en uno mismo.
Te alzan con un abrazo ceremonioso
y te ayudan a coser tus cicatrices.
Nos muestran las suyas,
encajando como un puzle
en el rincón de
TU MEMORIA.
Ahora lo veo todo
desde una lejanía que abruma.
Han pasado minutos, horas, días;
he huido kilómetros y kilómetros
puede que de mí misma.
Ahora veo de nuevo la lluvia
repiquetear contra el cristal,
mientras me pregunto
cómo elegimos destinos que nos separan.
¡Detente!
Piensa en el ritmo del mundo.
¡Ahora respira!
Mira la danza vertiginosa
de la vida con la muerte.
¡Siente!
El universo latir dentro de ti.
¡Ahora escucha!
Mira tu cuerpo vibrar
con una caricia.
Todo lo que temía se ha cumplido,
todo el miedo que un día tuve
apareció en mis manos una mañana,
lo guardé y coleccioné
durante mucho tiempo,
en vano.
Recluté cien mil soldados
para evitar mezclar sonrisas,
caricias y halagos.
Que no la vieras, que no me vieras,
todo fue en vano.
Intenté entenderte,
sonreír cuando no quería,
no llorar cuando lo deseaba.
Ser más fuerte, ser perfecta,
invencible.
Todo fue en vano.
Hoy duermes con ella,
hoy la besas.
Hoy sientes que el mundo
es un milagro entre sus piernas.
Yo sigo mi camino,
sigo nadando en busca
de una marea menos hostil.
Donde el amor goce de la belleza
de los arrecifes de coral y las sirenas.
Humanos,
no merecen llamarse inhumanos,
porque es lo que son:
oportunistas, arrogantes, opresores.
Es lo que son:
Inconscientes.
Es lo que son,
que retumbe en sus cabezas,
que se quede grabado en su piel
si yo ahora muero entre estas piedras.
En la fría losa nocturna
de esta ciudad infestada
de ponzoña que me carcome por dentro.
Luz de madre
son tus ojos
faros en la oscuridad
de mi alma.
Me descubro de nuevo en el baile
entre brazos torpes que me agarran,
miradas tristes ahítas de brandy.
Hoy quiero ser el objeto
que cambia de pareja.
Hoy me pierdo entre calles
que esconden momentos de tristeza.
Pasados, fugaces, borrosos.
Danzo para olvidar.
Danzo para encontrarme con mis miedos.
Allí, en ese sótano en penumbra,
sintiéndome en otros cuerpos.
Por supuesto que el odio requiere un gran esfuerzo.
No es para cualquier pecho.
Raquel Lanseros.
Estoy en paz
Después de volver al pasado
He cerrado los ojos
Y he perdonado a los que me hirieron,
Les he compadecido.
Ya no odio,
Ya no tengo miedo al miedo.
Estoy aprendiendo a abrazarme
En la soledad de la noche.
Ya no viene la dureza de la crítica
a removerme de mi ensueño.
Ahora puedo amar el silencio.
Donde habite el olvido,
en los vastos jardines sin aurora.
Luis Cernuda
Esperándome en algún lado,
en algún momento de mi vida.
En otra realidad donde fuimos más puros,
sin heridas,
niños, niños de nuevo, sin miedos.
Libres, libres por siempre.
Allí, allí tomarás mi mano
y te besaré la mejilla.
Allí, allí el perdón se filtrará entre mis lágrimas
y todo se disipará,
como este sueño,
en la marea.
agosto 13, 2018
Si un espacio para reflexionar…la poesia. Igual vivimos deprisa y hay que pararse a veces. Y ver lo importante en la vida o la vida misma te hace pensar.
Bonitas poesias. Saludos Pili