POEMAS DE ARACELI SAGÜILLO Y JOSÉ ANTONIO VALLE ALONSO LEÍDOS EN TORAL DE LOS GUZMANES

 

 

1 Antonio Colinas, Araceli Sagüillo y José Antonio Valle Alonso (foto de Jacqueline Alencar)

Antonio Colinas, Araceli Sagüillo y José Antonio Valle Alonso (foto de Jacqueline Alencar)

 

 

 

Crear en Salamanca tiene la satisfacción de publicar los textos leídos por los poetas Araceli Sagüillo (Palencia) y José Antonio Valle Alonso (Zamora), durante el XV Encuentro ‘Los poetas y Dios’, celebrado en la localidad leonesa de Toral de los Guzmanes el 2 y 3 de noviembre de 2018, bajo el epígrafe “Sobre la Palabra en flor”.

 

 

2 Foto de José Amador Martín

Foto de José Amador Martín

 

 

 

3 Araceli Sagüillo leyendo en Toral (Foto de Jacqueline Alencar)

  Araceli Sagüillo leyendo en Toral (Foto de Jacqueline Alencar)

 

 

POEMAS DE ARACELI SAGÜILLO

 

 

YO ME CONFIESO

 

 

Amo sin venir a cuento a las flores

y a los álamos, a la voz del tiempo

que se levanta débil.

Y a los santos que se encaraman a mis hombros.

Amo al sol colgado de mi aliento,

y al atardecer perdido en la distancia.

Amo a los ángeles lentos y silenciosos

que aletean mis adentros

y a las piedras incautas y vacías.

Con la mirada perdida

pierdo el movimiento de la eternidad

y me amo a mí misma

como amo a mi perro o a mis zapatos.

Amo al frío y al presentimiento

que intuye un lecho sobre el agua.

A la ternura amo, pero no se da cuenta.

No me arrepiento de amar

al coro de voces llegando a lo más alto.

Ni a vosotros, los poetas,

después del llanto que acarrea el invierno.

Amo y seguiré amando,

ahogándome en sueños.

 

 

 

4 Foto de José Amador Martín

  Foto de José Amador Martín

 

 

5 Araceli Sagüillo (foto de J. A. Valle Alonso)

Araceli Sagüillo (foto de J. A. Valle Alonso)

 

 

A DIOS

 

 

A ti, ciprés cruel de tanta sombra,

con el sol metido en las entrañas.

A la nana que acaricia la ternura,

y besa  sueños en todos los otoños,

los dejaré del todo en paz.

Al pasajero sol

le firmaré un cheque al portador,

pues me hizo sonreír

antes de conocer el cielo de Berlín.

A las mariposas, volando sin miedo

el fin de todos sus vuelos,

les concedo el don de la sabiduría.

La música del agua la llevaré conmigo,

me relaja, me concede deseos

a plena luz del día.

Esta agua llena de pájaros

me inundará la tarde, cuando el día pierda

su cavidad más tierna

y en el hueco de un vuelo

se llenen de libertad los pájaros del mundo

que acabarán volando el trajín

de todas sus posturas.

Pájaros… Pájaros y mis gestos

sobre el agua conducen la luz

hasta despertar al alba.

 

 

6 José Antonio Valle Alonso leyendo en Toral (foto de Jacqueline Alencar)

Valle Alonso leyendo en Toral (foto de Jacqueline Alencar)

 

 

 

7 Foto de José Amador Martín

 Foto de José Amador Martín

 

 

POEMAS DE JOSÉ ANTONIO VALLE ALONSO

 

 

LA LUZ EN TORAL

 

Hoy me he asomado a la fuente

de la memoria encendida,

y me he encontrado tan dentro

que la sangre me bullía.

 

Y he vuelto a lanzar un sueño

al hontanar de mi herida

por ver la sombra que deja

mi noche de cada día.

 

Por ver la noria del tiempo

dar vueltas sobre mi vida.

 

Por ver brotar a los ojos

destellos de mi alegría

al recordar en mis brazos

una ternura infinita

8 Valle Alonso y Sagüillo recibiendo varios poemarios

Valle Alonso y Sagüillo recibiendo varios poemarios

 

 

9 Foto de José Amador Martín

 Foto de José Amador Martín

 

 

LUNA LLENA…

 

 

…Y abre la luz la puerta del jardín,

la noche se va al alba llena de luna llena,

luna llena de sueños.

 

También se va al alba esa quimera,

sombra apagada al otro lado del espejo,

al fondo aquel donde duerme la soledad,

donde la ausencia también se va al alba,

todo se va al alba.

 

Delante de mi puerta pasa la alegría,

también se va al alba.

Hoy quiero retenerla en mis ojos de luna llena,

luna llena de amor a flor de luz,

donde los párpados duermen azul

a la primera miel del día.

 

Hoy quiero retener la alegría de todas las campanas

a este lado del alba,

a este nocturno de mis sueños.

Donde revolotean los pájaros del miedo,

inmensamente heridos,

allí en los acantilados de la noche,

allí, infinitamente hondos.

Donde apenas candil para encontrarme,

amagado en la ternura,

y escarbo la ceniza de un pecho enamorado,

que devuelve al regazo la paz de los recuerdos

y el mercurio derrama la flor de la locura.

 

Por no sé qué rendija del lado de la pena

estoy mirando al alba… siempre al alba…

y abrazo las paredes del llanto que me ahoga la memoria…

 

Ay corazón, hoy me sé donde habitas a pesar de las nubes

que ocultan la distancia.

Hoy se ha vestido de fiesta la alegría

y ha pasado delante de mí y no le he dicho nada,

va camino del alba,

todo se va al alba… todo se va al alba…

 

Hoy quiero retenerla. Ya se enciende en mis ojos.

Y se hace vuelo el día.

 

 

10 Foto de José Amador Martín

Foto de José Amador Martín

 

11 Salvado, Cortés, Adelaide, Sagüillo, Valle, Alencart y Martín (foto de Jacqueline Alencar)

Salvado, Cortés, Adelaide, Sagüillo, Valle, Alencart y Martín (foto de Jacqueline Alencar)

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