La poeta Margalit Matitiahu
Crear en Salamanca tiene el privilegio de publicar de forma anticipada estos poemas de Margalit Matitiahu (Tel Aviv, Israel, 1935), hija de padres nacidos en el destierro griego y cuyos ancestros más remotos habían sido expulsados de León, en 1492. Se licenció en Literatura Hebrea y Filosofía por la Universidad Bar Ilan, dirigió la revista “Entrelíneas” y ha sido Secretaria General de Federación Israelita de Escritores (1986-2008). Entre sus libros publicados están: “Kurtijo kemado” (1987), “Alegrika” (1992), “Matriz de luz” (1997), “Vela de la luz” (1997), “Kamino de tormento” (2000), “Bozes en la Shara” (2001), “Vagabondo eternel” (2001), “Despertar el selencio” (2004); “Asiguiendo al esfuenio” (2005), “Cantón de solombra” (2005) o “Luz cortada” (2015). Ella ha obtenido varios premios, como el Premio de Poesía Ateneo de Jaén (1996) o el Premio de Creación del Primer Ministro de Israel (1999). Pero su máximo premio posiblemente sea el que en 2003 le dedicaran una plaza en Puente Castro (León), el pueblo de donde hace cinco siglos salió su familia.
Estos poemas, escritos en judeo-español, serán leídos durante el XXIII Encuentro de Poetas Iberoamericanos, organizado por la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y que se celebrará en Salamanca del 14 al 20 de octubre de 2020, dedicado a José María Gabriel y Galán. Habrá actos presenciales y virtuales. La lectura de la poeta israelí será en una sesión online y saldrán publicados en la segunda antología del encuentro, titulada “Mundo Aquí”, también coordinada por el poeta peruano-salmantino Alfredo Pérez Alencart, director de estos encuentros desde su primera edición.
Bozes en la Shara
ENFLAMADA
Enflamada de palabras
que suben del abismo,
que se plantan en la tierra
y llevan sinieficaciones
A lo desconosido,
Me vo ande la endevina,
Para entender ruidos de paredes,
para descubrir muvimientos
debasho tejados transparantes,
para llevar a mis entranias
la sabiduria de la mente,
Para llenar mis manos vacias,
y desbrochar dolor
cuvierta con vozes
de otros mundos.
Luz cortada
CONVERSACIÓN
En una mañana mística
Nació conversación
Entre el arbolé y el viento.
Ramas se inclinaron,
Ruidos de aceptación nacieron
Junto el muvimiento de discusión.
Via el arbole abocado sobre el jardin
Como un guardián contra la tormenta,
Los ojos verdes de la natura
Lo miraban con agradeción.
Dientro mi corrieron palabras,
Se encolgaron en el aire
Para entender mundos invisibles
Nacidos en esta mística mañana.
Alfonso Fernández Mañueco con la Huésped Distinguida de Salamanca, Margalit Matitiahu (Foto de Jacqueline Alencar)
OLVIDO
¿Qué pasa en una noche sin esfuenio?
Que se embarra entre las parparas
¿Entre un desvío al otro?
Los momentos subieron del olvido,
La oscuridad se asentó en ventanas cerradas
Se enramo buscando salida…
Los muvimientos se espandieron como un hechizo,
Combatieron con mi puerpo,
Un aire frio mareo al selencio.
Penserios piedridos devinieron flechas,
Salieron a descubrir la luz de la mañana
Escondida en el olvido…
Margalit Matitiahu y Jacqueline Alencar, en Haffa y con Tel Aviv al fondo
VIAJE
En la valija se arecojeron
Penserios y preguntas
Para salir al viaje y
Celebrar la calmeza de la fuida.
Metió
orden en sus vestidos,
En sus mascas,
En sus células de la piel.
Salio
A descubrir la fuerza del arbole,
Desmenuzar palabras de dolor
Enfincadas en el aver.
Devino
Tierra, lagos y llanuras.
Agora en su valija flotan nubes
En su mente especias de fuego.
Y en su puerpo van corriendo palabras locas.
UN MOMENTO
Un momento avagarozo
Pasa de una ventana a la otra,
Va asigiendo mis hojos ficsados
En el espacio de la camareta.
El techo parece acercarse,
Va tocando mi puerpo hundido
En la silla de paja.
El eco de mis palabras mudas
viene de una luz lonjana,
se arrincona entre solombras
La calladez con maravia
Va mirando,
Mis oídos gritan penserios,
Imaginando distancias.
Alas de pasharos en desorden,
En boca de palomas preguntas
¿Es posible amar?
EN EL FONDO DEL TIEMPO
Cuando la escurrida
Cubrirá mi cara
Y la tuya
Y vamos a flotar en lo vacio
O en los fondos cubiertos
Con montones de tiempo,
Ahí, muestro esprito
Va crecer en cada letra y sinio,
Va desbrochar como un corriente de fuego,
Va encender palabras
Piedridad entre medianas del tiempo.
Estonses , muestros nombres
Se van a grabar en los caminos de secreto
Y van a abrir las puertas de unión.
Pilar Fernández Labrador, A. P. Alencart y Margalit Matitiahu (Foto de Jacqueline Alencar)
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.