Un auténtico privilegio resulta, para Crear en Salamanca, publicar dos traducciones inéditas de Alfonso Ortega Carmona, uno de los pocos grandes humanistas que le quedan a esta España del siglo XXI. Él, desde su retiro en Alemania, gustoso aceptó la invitación de A. P. Alencart para que vertiera al latín dos de más bellas composiciones del agustino. Ortega, de la Orden Franciscana, fue el fundador de la Cátedra de Poética “Fray Luis de León de la Universidad Pontificia de Salamanca.
Los dos textos han sido extraídos del volumen titulado Decíamos Ayer, antología del XVI Encuentro de Poetas Iberoamericanos realizada por Alfredo Pérez Alencart, poeta, profesor de la Usal y director del Encuentro. Poeta ‘secreto’ en español, Ortega obtuvo -en su juventud- prestigios premios concedidos por universidades alemanas e italianas a sus versos latinos. Aquí un fragmento de su poema “El viento y la palabra”:
(…)
Cálida y mansa
es también la palabra,
una conquista amorosa,
brisa de Campos Elíseos,
y rumor adorables en los labios
de Ulises: la que como lenta nevada
desciende
a los oídos
de los Inmortales
amigos de Dios.
(…)
Alfonso Ortega Carmona (Águilas, Murcia, 1929), doctor en Filosofía y Filología Clásica por la Universidad de Friburgo de Brisgovia y Doctor Honoris Causa por cuatro universidades de Europa e Iberoamérica, es una de las cumbres del humanismo europeo contemporáneo, cuyo pensamiento irradió desde Salamanca, a lo largo de su cerca de cuarenta años de magisterio como Catedrático de Filología Griega en la Universidad Pontificia de Salamanca, hasta su jubilación en 1998. En dicho centro académico fue Vicerrector, decano de las facultades de Filosofía y Letras y de Filología Bíblica Trilingüe, así como fundador y director del Instituto de Estudios Europeos y Derechos Humanos, de la Cátedra de Poética “Fray Luis de León”, y de la Cátedra de Taurología.
Filólogo, filósofo, dramaturgo, maestro de retórica, poeta, traductor de Píndaro, Quintiliano (magistral traducción, en cinco volúmenes, de Institutio Oratoria, aparecidos entre 1996 y 2000), Prudencio, San Isidoro de Sevilla y Horacio. Es Premio Nacional de Periodismo (1964) y, entre sus numerosas monografías, impresas desde 1958, están: Ovidio y la persecución de los intelectuales en Roma; El despertar de la lírica en Europa; Platón, primer comunismo de Occidente; Carácter agonístico de la cultura; Retórica. El arte de hablar en público; El discurso político (Retórica, Parlamento, dialéctica); Introducción a Homero, primer poeta de Europa; Retórica y homilética; Europa como idea y realidad; la muerte de Sócrates; El arte de negociar; El humanismo europeo y otros ensayos; Retórica y Derecho. Tareas del abogado.
Crear en Salamanca, repetimos, se honra de publicar estas traducciones que el maestro Ortega ha hecho, recientemente, de su admirado Fray Luis. Y Salamanca prosigue siendo lugar de referencia para la divulgación de las ideas y trabajos de este notable humanista que sigue la estela dejada por el poeta de la vida retirada.
Fray Luis, Unamuno, Ortega Carmona…, uno s foráneos que han prestigiado por el mundo la cultura salmantina.
AL SALIR DE LA CÁRCEL
Aquí la envidia y mentira
me tuvieron encerrado.
Dichoso el humilde estado
del sabio que se retira
de aqueste mundo malvado,
y con pobre mesa y casa
en el campo deleitoso
con sólo Dios se compasa
y a solas su vida pasa
ni envidiado ni envidioso.
FRAY LUIS DE LEÓN
IN EXITU DE CARCERE SCRIPSIT
Hic invidia et mendacium
me reclusum habuere.
Beatus ille status humilis
sapientis hominis, qui fugit
ex hoc mundum depravato,
atque mensa et domo paupere
praeditus, in agro delectabili
solussecundum Deum, vitam agit,
neque imvisus neque ínvidens.
In linguam latinam vertit: Alfonso Ortega
EN LA ASCENSIÓN
¿Y dejas, Pastor santo,
tu grey en este valle hondo, escuro,
con soledad y llanto;
y tú, rompiendo el puro
aire, ¿te vas al inmortal seguro?
Los antes bienhadados
y los agora tristes y afligidos,
a tus pechos criados,
de ti desposeídos,
¿a dó convertirán ya sus sentidos?
¿Qué mirarán los ojos,
que vieron de tu rostro la hermosura,
que no les sea enojos?
Quien oyó tu dulzura,
¿qué no tendrá por sordo y desventura?
Aqueste mar turbado
¿quién le pondrá ya freno?, ¿quién concierto
al viento fiero, airado?;
estando tú encubierto,
¿qué norte guiará la nave al puerto?
¡Ay nube envidiosa!:
aun deste breve gozo, ¿qué te aquejas?
¿Dó vuelas presurosa?
¡Cuán rica tú te alejas!
¡Cuán pobres y cuán ciegos, ay, nos dejas!
VERSIÓN LATINA DE “EN LA ASCENSIÓN”
Et, sancte Pastor, deseris his tuum
nigris, profundis vallibus hunc gregem,
solum atque flentem, et Tu refringens
aera nunc petis astra tutus?
Quos Tu beasti iam prius, anxii
maerore magno et tristitia vagi,
a Te cibati, abs te remoti
quo poterunt renovare sensus?
Quo iam ferentur lumina quae tuum
videre vultum, taedia nunc quibus
non sint? quibus percepta dulcis
vox tua, non sonet ulla dura?
Turbata frenis quis domet aequora?
Ventis quis iras lege coerceat?
Abscondito Te, quo magistro
nostra ratis penetrare portum?
Heu!, clara nubes, invida tam brevis
et gaudii huius, cur premeris? Volas
quo pulsa? Ut is dives!, sed heu! nos
quam miseros, sine luce, linquis!
junio 9, 2015
Estoy orgulloso de haber tenido como profesor al Padre Ortega, en uno de mis años en Salamanca, 1993. De él aprendí mucho en todos los aspectos. Muchas gracias Padre Ortega.
febrero 7, 2016
fui amigo del padre Ortega, y hace siete años que no se nada de él. me gustaría spoder contactar de nuevo, pero desconozco como. si alguien me pudiera facilitar su dirección o teléfono de contacto le estaría muy agradecido.