Crear en Salamanca se complace en publicar estos poemas de Elena Diaz Santana, quien nació en Palmas de Gran Canaria, estudió Filología Hispánica en la Universidad de Salamanca y es socia fundadora de la Asociación de Amigos de Unamuno de Salamanca.

Poemas suyos aparecen en diferentes antologías de los Encuentros de Poetas Iberoamericanos, como: Decíamos ayer, 2013, Explicación de la derrota, 2017, Por Ocho Centurias, dedicado al VIII Centenario de la Universidad de Salamanca y a Diego de Torres Villarroel, 2018, Regreso a Salamanca, 2019, El ciego que ve, dedicado a Antonio Colinas, 2019, De aquende y allende, 2023 y en obras como Travesías de alma: Doce escritoras con Teresa, 2015, en Invitación al hombre. Poetas contra la droga, en Poetas con el sur. Volumen para el grito, 2017 y en La sombra de la Cruz entre palabras.

Ha participado en la antología bilingüe: Um extenso continente, dedicado al poeta portugués Antonio Salvado.Tiene poemas publicados en la Revista El Cobaya, Papeles del Martes y Pasión en Salamanca. También en revistas digitales como: Crear en Salamanca. En el 2020 ve la luz su poemario: Al calor de tus manos, leído en la Catedral Nueva. en el acto del Poeta ante la Cruz. Traducido al portugués: Ao calor das tuas maos, editado por Labirinto. En el 2023 ve la luz: Nunca me fui de tu regazo, editado por la Diputación de Salamanca.

 

 

ENMUDECIÓ EL SILENCIO

 

 

Cada día es más silencio tu silencio

y no sabe el alma

cerrar en falso las heridas,

ni engañar a la noche

que sigilosa se acerca.

No sabe de atajos para aliviar el dolor,

llora mi alma tu ausencia,

tu despoblada memoria,

yo ante tí, sin nombre.

Tu cuerpo de ángel,

teje sus alas,

ensaya el vuelo,

quiere marchar.

Cuando te comparta con el aire,

entre tanta soledad,

entonces…

dame tú razones para la vida.

 

 

ALFABETO DE AUSENCIAS

 

No conozco el alfabeto

de la existencia que ahora me sostiene,

en este vuelo de pájaros sin canto.

Me llevó a la noche tu ausencia

y no sé cómo regresar a la luz

que me habitaba.

Convoco la alegría

y le abro mi corazón de nuevo

para que deposite su semilla en mí.

Sabed que vuelvo a ser tierra

para los frutos venideros.

 

 

 

Porque la mente más independiente

debe tener un lugar de origen, un locus standi

desde donde contemplar el mundo.

J.Mª Muñóz Quirós

 

 

Retorno al origen

donde ardían los símbolos

que esperan

volver a ser oro en mis estancias.

Ha enmudecido el mundo

y los aromas conocidos

solo perviven en la pátina

de los días de entonces.

Ahora no sé hacia dónde mi alma,

para arder como lo hacía

en aquel lugar primero.

Tráeme tiempo nuevo,

nueva luz en la mirada

y que el don sagrado de la belleza,

rompa este silencio que me habita

y vuelva a sentir que en las manos,

la dicha,

es un instante escurridizo,

que no debo dejar escapar.

 

 

 

Vivo aquí, acariciado por su eterna

presencia, desbordado de tanto

conocer lo que callado vive

en la senda escondida.

J.M-Muñoz Quirós

 

Que ya no me hiera tu recuerdo,

que sea dulce mosto en la memoria

y vuelvan las pequeñas alas de las luciérnagas,

a sostener mi mundo.

Que cante,

que cante el agua de la fuente

en el surtidor callado,

que tengo sed

de vida nueva.

 

DESDE ÁVILA TU VOZ

 

A J. Mª Muñóz Quirós

 

Habitas en la ciudad amurallada,

de piedras encendidas aunque la nieve

anide en los poros,

de su pétrea piel.

Conforma tu existencia,

tu sentir y tu pensar,

el paisaje almenado y fértil

de Teresa, la andariega

y el frailecillo Juan,

al que la celda

dio alas para volar, tan alto, tan alto…

Donde ellos pusieron sandalias,

es legado tu palabra.

Sigue las huellas de sus pies tu canto

y tu voz hace nido más allá

de los humildes palomarcicos,

salvando los seres en que se posa.