Alfredo Pérez Alencart (foto de Henar Sastre – El Norte de Castilla)
Crear en Salamanca tiene la satisfacción de publicar, de forma íntegra, la entrevista que el periodista Samuel Regueira hiciera al poeta A. P. Alencart, con el fin de dar noticia de la presentación vallisoletana de la antología ‘Una sola carne’. El acto se celebró en el Salón de Actos del BBVA, el pasado viernes 26 de mayo. Partes de esta entrevista aparecieron en El Norte de Castilla, edición del 27 de mayo.
Portada de la Antología ‘Una sola carne’
ALFREDO PÉREZ ALENCART INVOCA AL AMOR
ENLOS VIERNES DEL SARMIENTO
El poeta peruano afincado en Salamanca Alfredo Pérez Alencart (Puerto Maldonado, 1962) presentó ayer su antología ‘Una sola carne’, selección de distintos trabajos escritos entre 1996 y 2016, y cuyo tema común es, más que un orden cronológico, la invocación del amor. La iniciativa poética los Viernes del Sarmiento acogió la lectura y presentación de este libro a cargo de su autor, cuyas inquietudes pasan por lograr la máxima complicidad con quien recibe sus versos al otro lado de la página:
– ¿Qué compendia el título de esta antología, a qué señala?
Señala al connubio o esposamiento, a la sexualidad y al Eros, a lo que nos vivifica. En concreto, el título está tomado de la Biblia, del Libro del Génesis 2, 24-25, que conviene recordar porque habla que el hombre dejará a sus padres y se unirá a su mujer para convertirse en una sola carne, ya desnudos y sin tener vergüenza. Esta antología compendia cuatro lustros de querencias con la esposa de mi juventud, con quien acabo de cumplir 25 años de casado. Pero ya se sabe que el lenguaje del amor es universal y muchos hombres y mujeres se sentirán identificados con estos cánticos que dediqué a Jacqueline, mi musa exclusiva.
– ¿Ha experimentado una evolución poética a lo largo de los veinte años que recoge el libro?
Cuando alguien se repite demasiado lo que ofrece suele ser bagazo, aunque reciba aplausos de compromiso. En mi caso no hablaría de evolución, sino de revoluciones, de voltajes y temperaturas varias, de ritmos serenos o frenéticos en la palabra poética que he venido escribiendo. Ahora bien, lo cierto es que de un tiempo a esta parte voy decantando los versos, poniéndoles en cintura. Así cada imagen podrá ser más poderosa al ser expuesta sin antifaz ni regodeos.
A. P. Alencart (foto de Henar Sastre – El Norte de Castilla)
– ¿Cuáles son las inquietudes que ha perseguido a lo largo de su trayectoria poética?
Uno insiste en otros nacimientos o resurrecciones del Verbo, en que la voz puesta en forma de renglones sea solo aquella surgida desde las grietas del silencio, tras muchos truenos y relámpagos. Pero, por sobre todo, persigo que los óvulos insertados en las palabras que anoto sepan encontrar su contraparte fecundante en quien los lea o escuche. Y claro, que queden conmovidos, al menos por un instante que recuerden siempre.
– ¿En qué criterios se ha basado la selección de los poemas?
La selección ha sido hecha por la profesora e hispanista rumana Carmen Bulzan, destacada traductora de la obra ensayística, narrativa y poética de Unamuno en su país. Ahora bien, ha seguido las pautas que yo mismo uso cuando he hecho antologías personales, es decir, nada de orden cronológico y nada de largos ensayos introductorios. Precisamente ella acaba de terminar la traducción al rumano, que se publicará en Bucarest.
Alencart leyendo en los Viernes del Sarmiento (foto de Henar Sastre – El Norte de Castilla)
– ¿Cómo varía ante el lector la presentación de poemas en orden cronológico, en lugar de, digamos, la estructuración en torno a partes diferenciadas y vertebradas sobre una temática concreta?
– No tengo especial predilección por la poesía con fechas y lugares donde fue escrita. Me interesa el poema que se defienda solo, que tenga vida propia, plena autonomía. Lo otro es explicativo y nace con cierta minusvalía. Pero respeto, y mucho, a quien así lo prefiere, sea autor o lector de poesía. En el caso de ‘Una sola carne’ no se indica para nada las fechas. Ni siquiera el libro de donde se extrajo el texto, en el caso de los ya publicados. Y mucho menos de los inéditos, salvo el de los aforismos finales. Creo que al lector de mi poesía le gustará esta ordenación aparentemente desordenada pero nunca monocorde.
– ¿Ha percibido que su poesía se modificaba, enriqueciéndose mediante simplificaciones o mediante artificios formales?
-Es frecuente que por el artificio se escape la belleza, que por las métricas y rimas exactas empiece a solidificarse la escayola. Otra cosa es conseguir la difícil sencillez de decir mucho en poco, de poder frotar dos simples piedras y que de sus chispas surja la llama que no quema, la Poesía. A veces percibo que lo he logrado, pero hay que estar en guardia porque la Poesía es una moza muy esquiva.
– Las antologías suelen ser a la vez compendios y cierres de etapas. ¿Es su caso? ¿Qué futuro se le abre?
– Espero que nuevas antologías, tal vez de mi poesía con anclaje cristiano, de mi poesía social o cívica… Quiero decir que esta antología acoge buena parte de mis versos de temática amorosa, pero no cierra ni abre ninguna etapa. En definitiva, el amor o el desamor abarcan la poesía de todos los tiempos. Yo prefiero invocar al Amor.
A. P. Alencart con Jacqueline, en Valladolid (foto de Carlos Aganzo)
mayo 30, 2017
Parabéns, poeta Alencart.