Hoy, domingo, 6 de Abril, Domingo de Pasión en la Catedral de Salamanca a las seis de la tarde Soledad Sánchez Mulas será la Poeta que presente su poemario «Agua Desnuda», ante el Cristo de la Agonía Redentora, un acto singular en el Pórtico de la Semana Santa Salmantina en el que un poeta, en un acto de Amor, inmenso, desnuda su visión interior a través de la Palabra. Los que hemos tenido la suerte de participar en este acto, sabemos que supone lo más importante en la vida literaria de un Poeta Cristiano.

La poesía es en Soledad una profundización en las entrañas de la vida que toma raíces en el ser humano,  poesía de la sencillez que encuentra su razón de ser en su misma creación. Su poesía es el motor, es el sentimiento que aflora por los poros y que a veces sin querer o queriendo se debe medir y dosificar para no sufrir, aunque a veces es gozo puro, por eso su poesía es la vida o está llena de vida. Es la inspiración que siempre la acompaña, ella está ahí y nos aguarda, y antes que la busquemos  nos encuentra, y antes que la sintamos nos siente y nos espera paciente a que el ímpetu se desate, a que el sentimiento fluya en un instante de vida, en un momento atemporal, donde segundos, minutos y horas son la dimensión de lo racional, que el corazón no alcanza a entender. Hay que buscar  la claridad y nacer en forma de verso, definir el mundo hecho que nos  lleva al éxtasis con el beso oculto de su silueta, que acompaña nuestro camino, que acaricia nuestro rostro, nuestra frente, nuestros  labios. Buscando el no olvido y la liberación de la prosa de la oscuridad. Su poesía parte de un hondo sentimiento cristiano

“Después de esto,

sabiendo Jesús que ya todo estaba cumplido,

para que se cumpliera la Escritura, dice:

‘Tengo sed’.” 

Juan 19:28

Soledad, mujer al pie de la Cruz, mirando al Crucificado, Poeta ante la Cruz, alma que se desvela como Agua para Tú Sed, Señor. Agua desnuda, purificadora, que lava y quita la Sed… Madre al lado de su hijo… Nueva María acompañando a Cristo en su Agonía. Cristo- Luz que ilumina, Ciudad de Luz,  Ciudad Celestial, morada de la Esperanza para los Creyentes que caminamos detrás de la Cruz en este siglo de carencias y dolor…

Palabra y Luz, Agua y Sed, María y Jesús, Agua, caudal del alma a punto de desbordarse, repleto de miedos, de arrepentimientos, de dudas… Agua también de gracia, de vida, de esperanza… Agua viva que es tierra, Luz y Cielo. Alba de Dios. Estremecimiento que asciende por la sangre… Brisa en la brisa, puerta y llave, muro de luz leve, Fronda de Dios y sima de todo. Principio y fin… Agua de roca, Agua Desnuda y viva, paraíso de Dios.

Fotos: José Amador Martín