MANUEL RODRÍGUEZ MARTÍN. «RETAGUARDIAS» PROYECTO POÉTICO FOTOGRÁFICO

 

«Crear en Salamanca» publica cinco poemas del proyecto de Manuel Rodróguez Martín, que recientemente expuso su trabajo «Retaguardias»  en la Biblioteca  Torrente Ballester de Salamanca

 

Manuel es profesor de la Universidad de Salamanca e ingeniero industrial, fotógrafo y poeta. En el ámbito de la fotografía ha ganado en enero de 2024 el Concurso Social de la Real Sociedad Fotográfica y ha colaborado en diversas obras colectivas.  Actualmente desarrolla su proyecto personal denominado Retaguardias en el que se combinan fotografías con diferentes poemas, y que ha sido expuesto en 2023 en la Sala de la Biblioteca Torrente Ballester del Ayuntamiento de Salamanca.

 

 

Manuel trabaja principalmente la fotografía en blanco y negro con un fuerte matiz expresivo y emocional, y con una intencionalidad narrativa clara. Su objetivo es explorar el siempre presente vínculo entre poesía y fotografía para ofrecer experiencias narrativas.

La idea es exponer fotografías que abarquen el paso del tiempo y las expresiones y siluetas de personas que se pueden ver desde una vista posterior, como viéndolo pasar (de ahí lo de Retaguardias, que es el título de la exposición). Hay algunas representativas de la infancia, otras de la juventud, otras de la madurez y otras de la vejez pero no tanto como secuencia, si no como ciclo.

 

 

Entrada

Huyes con paso firme,

abandonando la fotografía

sin temor a saltar hacia el abismo

del encuadre bendito

de la infancia.

Esa que cuándo no se piensa en ella

ya se ha ido

sin dejar prueba alguna de su rastro.

 

Dancing

 

 

Sobre tu piel de piedra (color oro),

vestías

ropa prestada.

Arete,

esposa del poderoso rey Alcínoo

reconoció esa ropa:

le sonaba.

 

Quizá se ocultaba tu belleza

pero hacía

que los turistas se pararan a hacer fotos

cubiertos con gorros de paja

tan horribles

que harían a Afrodita entrar en furia

y el Olimpo temblaría sin descanso.

 

Entre el trasiego de bicis y gentío

te veías,

algo fotogénica,

y llena de una fuerza arcana proveniente

de enigmáticas fuentes ancestrales

o de un mundo

que dejó de reconocer a sus símbolos

y se arrastra a una decadencia

de lo bello

(o a una dictadura de lo horrible).

 

Perla Negra

 

Del misterio y la umbría de una noche

en la peor aldea de algún sitio

se mostró una silueta

pensativa

y dramática

pero con la mirada

puesta a un horizonte

tan presente,

que sirve de brújula a un destino

sin cara ni presencia: acongojado.

Tan enormemente falto de agallas

que se adapta a la forma del que mira.

 

Eras tú, misteriosa a tu manera,

vestida por la sombra del ocaso

en un monte,

y en un vivo santuario

elevado a los dioses

por los druidas

que pisaban el barro

sin mancharse.

 

 

 

Carabinieri

La ley se opone, tal vez, a lo justo

y una mirada que torpedea un buen

momento

de introspección

surge de la nada, rumbo al todo,

totalmente anulada

por esa turba de almas que remueve

hasta el más triste rastro de la musa.

 

 

Corredor de bolsa

 

Nadie le conocía en un lugar

dónde el viento aún vierte sus palabras

y su historia,

se cuenta sin saber que era la suya,

regando de lágrimas sus dos ojos,

(Ulises al escuchar a Demódoco).

 

Nadie en su territorio es buen profeta

cuando la profecía está en la mente

(piensas).

Sólo la muerte hace justicia

al rumor de que todo es pasajero.

Mientras tanto,

apolo estará ya tensando el arco

(no cupido).

 

Este es el enlace del portafolio que tiebe en la Real Sociedad Fotográfica. Marca un poco el contexto narrativo de la exposición.

Manuel Rodríguez Martín

 

 

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