El poeta Alfredo Pérez Alencart (foto de José Amador Martín)

 

 

Crear en Salamanca tiene la satisfacción de publicar la reciente entrevista que el periodista Ricardo S. Acosta hiciera a Alfredo Pérez Alencart, y que fue reproducida por vez primera en El Norte de Castilla, el periódico decano de la prensa española (165 años de fundado). La misma tiene la siguiente entradilla: “2019 ha sido un fructífero año para la obra propia y los proyectos culturales del reconocido poeta peruano-salmantino, muy traducido por el mundo”.

 

Salamanca de noche (foto de José Amador Martín)

 

 

 “SALAMANCA ES MI LUCIÉRNAGA DE PIEDRA Y EL LUGAR

DE RESONANCIA DE LOS SALMOS QUE ESCRIBO”

 

No es fácil realizar un balance anual, especialmente para alguien como el destacado poeta Alfredo Pérez Alencart, siempre presente en relevantes proyectos culturales que ayudan a incrementar el prestigio literario de nuestra ciudad. Pero nos acercamos a él aprovechando estos días de sosiego navideño y de vísperas del nuevo año por llegar. Y agradecemos su generosidad al atendernos.

 

-¿Cómo resumiría su ejercicio poético durante el año que vamos dejando?

 

– En resumidas cuentas diría que me ha dejado algunas migajas que esplenden, con largueza, la labor que he podido hacer o pergeñar. Poco pido y mucho me concede el Amado galileo. No se trata de falsa humildad sino de creer en la Gracia que va unida al esfuerzo propio, pilar de nuestro tiempo vivo.

 

Alencart con su libro Barro del Paraíso (foto de José Amador Martín)

 

-¿Será por eso que salió de imprenta su libro ‘Barro del Paraíso’?

 

– Ese poemario se publicó en enero y es, efectivamente, una ofrenda más al Poeta de Nazaret. Cuando se trata de Él, todas las horas son de resarcimiento y gratitud. Por lo general, los seres humanos tenemos necesidad por conocer el sentido, la significación y la trascendencia de nuestro existir. En mi caso, gracias a la poesía y a la fe tengo ciertas respuestas y consuelos ante la realidad que está pulsando detrás de las apariencias; apariencias que son de las que ocupan la mayoría, lamentablemente.

 

-Ha logrado que Salamanca sea una referencia actual en cuanto a la poesía iberoamericana se refiere ¿Qué nos puede decir sobre ello?

 

– Suelo decir que Salamanca es mi Luciérnaga de Piedra y el lugar de resonancia de los salmos que he ido escribiendo y acopiando durante más de tres décadas de morar y estar acantonado aquí. Pero poco es lo que he devuelto para lo mucho que recibí. En todo caso y dejando de lado mi propia poesía, puede estimarse como ‘palabra cumplida’ el que me haya dedicado a coordinar algunos encuentros, antologías o premios poéticos que tienen relevancia más allá de las fronteras provinciales.

 

Algunos poetas invitados al una de las ediciones de Los Encuentros salmantinos (foto de José Amador Martín(

 

-Impresiona la repercusión que tienen los Encuentros de Poetas Iberoamericanos que dirige…

 

– …Le agradezco su consideración. Ya vamos hacia la XXIII edición ininterrumpida prevista para mediados de octubre, y los logros se deben a la excelencia de la propuesta que presentamos cada año, conformada por poetas de primera calidad junto a otros a quienes damos la oportunidad de participar en una comunión poética que marcará su trayectoria de forma indeleble. También se debe a la plena confianza que recibo desde el Alcalde, la Concejala de Cultura y el propio gerente de la Fundación Salamanca. Sin estos ingredientes, más la consabida pasión hacia la Poesía y la menos usual, pero necesaria, generosidad para con la obra de los demás, lo cierto es que exiguo habría sido el resultado.

 

– A este respecto, ¿podría decirnos de dónde saca tiempo para las antologías, catálogos, prólogos, artículos, ensayos  o traducciones que han sido publicadas este año por usted?

 

– Las hermosas antologías dedicadas a San Juan de la Cruz (‘Llama de Amor Viva’) y a Eunice Odio (‘Eunice, cien veces cien’), por ejemplo, las fui preparando desde el mes de marzo, pero fue entre julio y agosto, cuando otros descansan, cuando yo trabajé bastante, conjuntamente con Jacqueline, mi compañera y esposa. Buena parte de lo cosechado en septiembre es mérito de ambos, aunque algunos libros traducidos del portugués al castellano son sólo de ella y otros de mi autoría. En total en septiembre se publicaron 13 libros o catálogos que hicimos o ayudamos a corregir. En esto solemos ser como las hormigas, que se preparan para que durante el invierno tengan de qué nutrirse. Y nosotros solemos bromear que nos alimentamos de libros, una broma muy seria puesto que el alimento espiritual también es fundamental para ciertos seres humanos como nosotros.

 

Alencart con algunas de los libros editados (foto de José Amador Martín)

 

 

-Todo esto se compagina con los premios internacionales que preside o coordina desde Salamanca. ¿Háblenos de ellos?

 

– Si Borges estaba orgulloso de los libros que había leído y no tanto de los que había escrito, podría parafrasearlo diciendo que mi pequeño orgullo recae en los premios de poesía que coordino o presido, y mucho menos de mi poesía. Y esto es verdad, porque hemos logrado desterrar contubernios y demás favoritismos o intereses crematísticos que rodean a la mayoría de los premios, tanto aquende como allende el castellano.  Coordino el Premio Internacional de Poesía Pilar Fernández Labrador, cuya pasada edición tuvo 915 participantes de 24 países y fue ganado por el libro ‘Umit’, del joven poeta salvadoreño Luis Borja. También presido el Premio Internacional de Poesía António Salvado-Ciudad de Castelo Branco, que se concede en Portugal pero que tiene su semilla en los encuentros iberoamericanos de Salamanca. Luego está un nuevo galardón que presido con especial emoción, el Premio Rey David de Poesía Bíblica Iberoamericana, convocado desde Salamanca, así como la presidencia del Premio Internacional Francisco de Aldana de Poesía en Lengua Castellana, que se concede en Nápoles pero se entrega en Salamanca. Finalmente, agregar que formo parte del jurado del Premio Internacional de Poesía Gastón Baquero, que se concede y entrega en Salamanca. Lo único que no se debe perder, vida aparte, es la credibilidad, la confianza…

 

Miembros del jurado, Alencart, Pérez Castrillo, Ruiz Barrionuevo, Salas, Barrera, Fonseca, Fernández Labrador, Aganzo y Muñoz Quirós. Foto de José Amador Martín

 

 

– Entiendo que tiene a su cargo otros encuentros además del prestigioso encuentro iberoamericano de cada mes de octubre.

 

– Así es, son otros dos encuentros de menor magnitud en cuanto a presencia de poetas y prensa cultural, pero que para mí tiene una importancia profunda porque tratan de poesía volcada a Cristo. Se trata del Encuentro ‘Los poetas y Dios’, que se celebran en Toral de los Guzmanes (León) y que ya llevan XVI ediciones. El otro, que cada mes de abril se realiza en Salamanca, es el Encuentro Cristiano de Literatura, con XI ediciones hasta la fecha.

 

-Por último, ¿sigue escribiendo más poemas suyos?

 

– Es algo inevitable porque la poesía nos viste de resurrección, decantando lo anecdótico para dejar constancia de la previsión del mañana o de la provisión de lo acontecido al yo con su desnudez y sus sombras o felicidades.

 

(Salamanca, 28 de diciembre de 2019)

 

 

 Plaza Mayor de Salamanca (foto de José Amador Martín)

  Perfil de Salamanca (foto de José Amador Martín)

Entrevista a Alfredo Pérez Alencart en el Norte de Castilla