Foto. José Amador Martín Sánchez
Solos tú y yo, en silencio
Elevo los ojos al azul
y aspiro el perfume doliente de la tarde.
Has pautado los cielos
para escribir en ellos
la dulce melodía del silencio.
¡Tan pequeña bajo tus claras manos!
¡Tan grande en el dolor
de este imperfecto sueño!
En suspenso
la noche,
con sus pájaros;
tu aliento entre las hojas de los árboles;
la turbia vibración de mis secretos
sobre la oscura agua.
Anocheces y abrigas, como una madre tierna.
La nota de este instante,
en su quietud de estatua,
acompasa el latido, conmueve el corazón.
Anocheces. Me arropas con tu paz.
Ardo de luz
sumida en la penumbra.
Solos tú y yo, en silencio.
Solos tú y yo en la calma
de este concierto azul.
octubre 5, 2012
Mi empleado me comento acerca esta pagina. En verdad esta muy buena.