El poeta Andrés Quintanilla Buey (Salamanca, 2003, foto de A. P. Alencart)

 

Crear en Salamanca se congratula en publicar esta selección poética de Andrés Quintanilla Buey, un grande y noble poeta de esta vieja Castilla que se resiste a reconocer su obra y sus grandes esfuerzos por difundir la obra de los demás. La selección ha sido hecha por el poeta Alfredo Pérez Alencart, amigo y admirador suyo.

 

 

 

SIETE POEMAS, MÁS TRES MANUSCRITOS Y VARIAS FOTOGRAFÍAS INÉDITAS

Alfredo P. Alencart, Pepe Ledesma y Andrés Quintanilla Buey (Salamanca 2006, Jacqueline Alencar)

 

 

BIENVENIDA
(Madrigal para una niña negra)

Te trajo el mar y te dejó en la arena
envuelta en algas. Pasmo en cada ola.
Equivocada y sola,
niña de selva y sal, negra azucena,
te trajo el mar y el mar te hizo española.
Como una niña buena
-primer sueño de espuma y caracola-
te quedaste dormida, en la serena
quietud, lejos del susto y de la pena,
del pánico que asola
la tierra que dejaste. La cadena
se ha roto. Ya eres libre. Te aureola
la luz del alba. Duerme. Dulce, suena
la brisa, que recoge y enarbola
-niña de gracia llena-
mi madrigal de niebla y de amapola,
de junco y de colmena.
(Premio «Fray Luis de León» 2003. Madrigal de las Altas Torres.)

 

 

 

Andrés Quintanilla Buey, por Miguel Elías)

EL MAPA

 

 

Aquí, donde señalo, estaba España.
En este hueco: aquí estaban los ríos,
los montes, los caminos y los pueblos
de mi patria. Aquí el sol, y la niebla;
la lluvia, a veces nieve… Y aquí mismo,
en este punto, aproximadamente,
mi sitio, entre mi gente, ilusionados
el árbol y el adobe, la callada
presencia de la ermita, el cementerio,
la era, la cigüeña, el sosegado
sonido de la fuente…

Hablo de España,
de España,
sí, de España, de ese mágico
lugar, que para muchos de nosotros
fue cuna, fue canción, luz, asidero,
historia compartida, fe heredada.

Aquí mismo, mirad, en este hueco,
el extraño país del desencanto
que un día tuvo un nombre; aquel lejano
lugar de la alegría algunas veces,
cercado por el hielo y por la espuma:
España, una palabra que ahora suena
a nube inalcanzable, a lejanía.
Palabra de seis letras para un sueño.
Ah, cuánto desamor y cuánto olvido.

Os digo que aquí mismo, pongo el dedo
encima de la llaga y se estremece
mi piel y se me cuela la amargura
sangre adentro, hasta el alma.
En este sitio,
mis padres, la abuela Ángela, el amigo
madrugador, el niño aquél, la historia
más mía y más de todos.
Debajo de esta tierra, que ha perdido
el nombre. En este hueco.

¿De qué lugar ha de llegar el viento
que ponga en pie a los árboles, que traiga
la lluvia, estoy seguro, la esperanza?
¿De qué lugar la luz que nos devuelva
el nombre y el latido:
España y la costumbre de nombrarla?

Aquí, donde señalo.

 

Poetas de Cánticos de la frontera (Portugal y Castilla y León), entre ellos Quintanilla y Araceli Sagüillo (J. Alencar, 2005)

 

 

 

 PRESENCIA Y AUSENCIA DE FRANCISCO PINO
(Dos sonetos)

EN EL PINAR DE ANTEQUERA
«VILLA MARÍA»

Aunque no era verdad, dentro sí era
verdad la sombra. En el jardín, el sueño
del aire y de las rosas, y el empeño
del agua trepadora y verdadera.

Aunque no era verdad, no era imposible
la luz, iluminando de aquel modo
el agua, el aire, el sueño. Todo.
¡Y todo perseverando en lo irreconocible!

Hay que saber entrar, hallar el punto
exacto. Y elegir: después las rosas,
pero antes el obstáculo del hierro.

La luz, la sombra, el aire, el sueño, junto
al ruido más extraño de las cosas.
En el portal, muy malherido, el perro.
18 de Enero de 1997 – Cumpleaños del poeta

 

 

 

EN EL PINAR DE ANTEQUERA
«OH, PÁJARO INFELIZ» (*)

Oh, pájaro infeliz, infeliz pino,
niebla infeliz y derrumbada, muda.
Charco infeliz. No espejo. Agua desnuda.
La verja y nadie. Y nadie en el camino.

Oh, infeliz soledad. Dolor vecino
del sueño más desierto: puro y duro.
Oh, cansancio infeliz del tren oscuro
que pasa, sin viajero y sin destino.

Detrás, ni rosas. Nadie. Solamente
ausencia y estupor. Vacío. ¿Dónde
el gesto extraño, la palabra sabia?

Oh, pájaro infeliz, jaula al relente,
grito que se silencia y que se esconde.
Muerto el poeta, se acabó la rabia.
14 de Diciembre de 2002 – A vueltas con su muerte
(*) Francisco Pino, “El pájaro enjaulado”

 

Entregando un premio a Pilar Iglesias, en Los viernes del Sarmiento (Valladolid)

DE PRONTO, TANTAS ROSAS

Han llegado de pronto tantas rosas,
tantas, que son más que los pájaros.
Me asustan.
Desde muy lejos, a través del frío,
con el aroma del otoño último,
y se entregan, dóciles, a la luz,
formando parte aún del paisaje del sueño,
resistiéndose a despertar.
Algunas copian a la nieve
y tiemblan, como tiemblan las manos de las novias
ante el primer descubrimiento.
Otras son amarillas, suaves, como de nata,
la color desmayada de la muerte.
Las hay con el ánimo detenido,
todavía rocío,
¿qué color elegir?,
-si piedra, si romero-
todo se resuelve en una palidez inquietante y bellísima,
como de niña enferma.
y rosas encarnadas, las más rosas,
limpias, brillantes, como gritos recientes,
o casi negras otras, como la sangre antigua.
En un extremo forman tertulia los cipreses,
surge el agua y el aire se enjoya y se entomilla,
se asoman a mi cuarto las hojas de la parra,
por todos los tapiales tiende su alfombra verde
la yedra… No sé cómo se llaman
las otras maravillas que surgen de la tierra,
que cubren el paseo y me amortiguan.
Aquí la paz, el dulce refugio del silencio.
Nada me duele. Siento
que el corazón regresa a su sitio y sereno
me riega como antaño.
Qué azul el cielo y cuánta ternura en la mañana.
Qué cerca Dios.
Voy a dormir. Ahora, tan temprano, a destiempo,
voy a dejar que el sueño me esconda.
Pero antes,
para evitar presencias del todo inoportunas,
voy a cerrar por dentro el jardín, a clavar en la entrada
-¡ay, Alfonsina Storni!- un letrero
diciendo que he salido.

 

Alencart, Amat, Sagüillo y Quintanilla Buey en Toral (Jacqueline Alencar)

 

VIENTO DE ESPAÑA

“De España, ni viento ni casamiento”

Qué mal viento de España, qué mal viento
el que te llega, Portugal querido.
El viento de una España que ha perdido
el gesto, la figura, el sentimiento.

La España sin razón de este momento,
¿qué extraños españoles ha parido?
La hispana dignidad, ¿dónde se ha ido?
¡Dónde el valor y dónde el juramento?

Ahí te va, Portugal, el triste aliento
de la española tierra, un pueblo herido
por tanto desamor y furia ciega.

Ni viento, Portugal, ni casamiento…
Pero abre el corazón, para el latido
de España, unido al viento que te llega.
(a Alfredo Pérez Alencart)

 

Andrés Quintanilla Buey en Salamanca (Jacqueline Alencar, 2007)

 

NOCTURNO

 

 

Y no abrirá los ojos, por más que, tentadora,
la noche me reclame. No estoy. La brisa suave,
la yerba y sus aromas, el llanto de los grillos,
los árboles, el río, el familiar sendero,
todas aquellas cosas que imagino cercanas,
no están conmigo ahora. Todo ha quedado afuera,
ajeno e ignorado. Nada me pertenece
y a nada pertenezco.
He cerrado los ojos y me he quedado dentro,
del todo protegido, en mi soledad húmeda,
viviéndome, viviendo la oscuridad sin tiempo,
sabiéndome a resguardo. Aquí nada se muere.
Todo está como siempre, nana aquí tiene entonces,
ni ahora, ni mañana: únicamente siempre,
un siempre detenido en el instante eterno,
un siempre que no existe más que en este paisaje,
un siempre sin medida, asombrado á inmóvil.
Pájaros de la noche, terribles buscamuertos,
me llaman, me amenazan, me dicen que me asome,
que salga, que me muestra valientemente hombre.
No quiero. Ya he encontrado la paz y la armonía
en este hueco, casi como un vientre materno.
Un hueco a mi medida, en el que no es posible
la luna, exacto, limpio; tampoco el cielo. Sólo
esta quietud caliente, como de niño haciéndose.
Los ángeles del sueño me han cosido los ojos.
Estoy como dormido, pero estoy muy despierto.
A ojos cerrados siento la piel que me contiene,
como una mano en fino guante de cirujano:
perfectamente entero, ni un poro a la intemperie.
Renuncio a ver el agua, a sentir le, caricia
del viento o de la nieve, a escuchar los rumores
del mar -! el mar!-, las luces que anuncian cada día.
Lejos de mí la noble compañía del perro,
la dolorosa urgencia de una muchacha en junio.
Qué larga la distancia, qué insalvable el abismo,
qué lejanas, qué débiles,
las voces que me llaman, las manos que me buscan.
Siento cómo camina el tiempo, inexorable,
y ya no sé si es una o son miles las noches
que me han sobrepasado. Cuántos años, o siglos,
sin mí, que me he quedado tan escondido y quieto,
sin ofrecer resquicio, los ojos apretados,
para la luz de afuera.
Cuando llegue del todo la aurora presentida,
-me avisará una lluvia extraña, diferente-,
cuando bajo mi cuerpo nazca una yerba nueva
y yo sienta su empuje,
cuando no reconozca los ruidos, ni el silencio,
volveré a abrir los ojos, regresaré a la vida
en un mundo distinto.

 

António Salvado, Alfredo Pérez Alencart y Andrés Quintanilla Buey, en Toral (J. Alencar, 2006)

 

 

PARA DESPUÉS

Poned, junto a una flor, no sé, mi nombre,
las letras hacia arriba: Andrés. Y luego,
no sé, quizás la fecha, junto al ruego
de una oración: orad por este hombre.

Tumbada, mi mejor fotografía,
para que se deshaga a escarcha y fuego.
Dejad, no sé, un rincón para el espliego.
Si hay que poner cruz, poned la mía.

Sembradme, a poder ser, a flor de tierra;
si no es mucho pedir, junto al camino.
Sin llanto: una canción y una sonrisa.

Y recordadme siempre en pie de guerra.
Decid: unió a esta tierra su destino;
nadie amó tanto y nadie tan deprisa.

 

Eduardo Fraile y Andrés Quintanilla (Jacqueline Alencar, 2006)

ALGUNOS DATOS SOBRE ANDRÉS QUINTANILLA BUEY

 

Este poeta de Castilla nació en 1932 y falleció, en su Valladolid de adopción en el año 2008, siendo Presidente de la Academia Castellana y Leonesa de la Poesía. Fue fundador de la revista poética hablada «Juan de Baños» (Palencia), del grupo literario y artístico «Sarmiento» (Valladolid) y de la «Academia Castellana y Leonesa de la Poesía», de cuya junta gestora fue presidente hasta su fallecimiento. Secretario y juglar de la «Academia de Juglares de San Juan de la Cruz». Miembro colaborador del «Instituto de Investigaciones y Estudios Abulenses Gran Duque de Alba» de la Excelentísima Diputación de Ávila; correspondiente de la «Institución Fernán González», «Academia Burguense de Historia y Bellas Artes» de Burgos, de la «Institución Tello Téllez de Meneses» de la Excelentísima Diputación de Palencia (Andrés Quintanilla muere sin haber pronunciado su discurso de ingreso, desconociéndose el motivo). Hijo adoptivo de Fontiveros – Solar de la Poesía.

Entre los muchos premios y reconocimientos literarios que recibió, se destacan:

 

Poetas Arrieta, Salvado, Samprón, Amart Alencart y Quintanilla en Toral

(foto de Jacqueline Alencar)

 

EN POESÍA

– Premio BOSCÁN por el Instituto Catalán de Cultura Hispánica, primera edición de «Rogelio».
– Premio MARINA de la editorial Trebolle, segunda edición de «Rogelio».
– Premio de POESÍA GUIPÚZCOA por su libro «El día en que enterraron a Antonio Arana», ediciones Rondas.
– Premio CIUDAD DE CEUTA.
– Premio GARCILASO.
– Premio CIUDAD DE Martorell.
– Premio ROSALÍA DE CASTRO.
– Premio GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER.
– Premio FRAY LUIS DE LEÓN.
– Premio VILLALAR DE LOS COMUNEROS.
– Premio CÍRCULO DE POETAS y ESCRITORES IBEROAMERICANOS DE NUEVA YORK.
– Premio CIUDAD DE VALLADOLID.
– Premio de la PLAZA DCHA V ADA en Archidona (Málaga).
– Premio en la FIESTA DEL VERDEO en Arahal (Sevilla).
– Premio BARAHONA DE SOTO en Lucena (Córdoba).
Estos tres últimos premios citados son algunos de los reconocimientos recibidos por Andrés Quintanilla Buey en Andalucía.

– «BOSCÁN», del Instituto de Estudios Hispánicos.
– «GUIPÚZCOA»
– «CIUDAD DE CEUTA»
– «VILLALAR DE LOS COMUNEROS»
– «GUSTAVO ADOLFO BECQUER»
– «MARINA»
– «ROSALÍA DE CASTRO»
– «VILLA DE MARTORELL’
– «QUIJOTE DE ORO»Y «QUIJOTE DE PLATA»
– «CIUDAD DE ALCALÁ DE HENARES»
– «CIUDAD DE CORNELLÁ»
– «CIRCULO DE POETAS y ESCRITORES IBEROAMERICANOS DE NUEVA YORK»
– «GARCILASO»
– «CIUDAD DE VALLADOLID»
– «FRAY LUIS DE LEÓN» EXCMO. AYUNTAMIENTO DE MADRIGAL DE LAS ALTAS TORRES

 

 

Quintanilla, Salvado y Lopes Pires en Salamanca (Jacqueline Alencar, 2005)

EN TEATRO

– Premio TOMÁS MORALES del Cabildo Insular de Gran Canaria.
– Premio GONZALO CANTÓ VILAPLANA del Excelentísimo Ayuntamiento de Alcoy (Alicante).
– Premio BARAHONA DE SOTO en Lucena (Córdoba).
– Festival Internacional de Teatro de Sitges con su obra «La muerte en primavera».
– «GONZALO CANTÓ VILAPLANA» del Excmo. Ayuntamiento de Alcoy (Alicante)
– Nacional «TOMÁS MORALES», del Cabildo Insular de Gran Canaria,
– «BARAHONA DE SOTO» de teatro en Lucena (Córdoba), etc.

Estas y otras obras de teatro han sido representadas en numerosas ciudades de las comunidades de Cataluña y Castilla y León.

– «LA MUERTE EN PRIMAVERA», Premio Extraordinario Gonzalo Cantó Vilaplana», Excmo. Ayuntamiento de Alcoy, (Alicante) 1962
– «FRÍO EN LAS MANOS», Estrenada por el Grupo Palencia de Teatro, Diciembre 1966
– «EL ÚLTIMO ÁRBOL», Estrenada por el Grupo de Teatro Infantil del Colegio de San José, Valladolid, Junio, 1975
– »LOS PÁJAROS MUERTOS», Estrenada por la Compañía Pequeño Teatro de Barcelona, Teatro Prado, Sitges, 1971
– »PAPÁ BOBY», Estrenada por la Compañía Pequeño Teatro de Valladolid, Teatro de la Feria de Muestras, Valladolid, 1979
– «¿CULPABLES O INOCENTES?», Leída por el Grupo Infantil de Teatro, Colegio de San José, Estudios de la Emisora Radio Popular, Valladolid, Mayo 1979.

 

Quintanilla, Valle Alonso, Alencart, Lostalé y Sagüillo (J. Alencar)

 

NARRATIVA

 

– »LA ESCALERA EN EL AIRE», novela, Caja de Ahorros de Asturias, 1981
– »DESPUÉS DEL ATENTADO», Viernes del Sarmiento, Obra Cultural BBV, 1981
– «VIZENZA», Viernes del Sarmiento, Obra Cultural BBV, 1981
– «CIUDAD DE SAN SEBASTIÁN» de cuento
– «CASINO DE MIERES» de novela corta
– Varias veces el Premio «HUCHA DE PLATA»

 

Lectura en Toral (Jacqueline Alencar)

OBRA PUBLICADA

POESÍA

– «DIARIO QUEHACER», Industrias Gráficas Diario Día, Palencia.
– «INSTANTES», Colección «Rocamador», Palencia .
– «PAZ EN LA TIERRA», Industrias Gráficas Diario Día., Palencia.
– «DIBUJOS ANIMADOS», Industrias Gráficas Diario Día, Palencia.
– «CUENTOS DE HADAS», Industrias Gráficas Diario Día, Palencia.
– «UN POEMA DE AMOR» Gráficas Alonso, Valladolid ..
– «LA HERIDA», Editora Comercial Trebolle, Orense.
– «COMO LA PISADA EN EL CAMINO», Industrias Gráficas Diario Día, Palencia.
– ‘MARÍA SOLTERA»‘, Editorial Carabela. Col. «Nudo al alba». Barcelona.
– «LLANTOGR(A», Obra Cultural BB, Valladolid
– «AL BORDE DE TU SUEÑO», Industrias Gráficas Diario Día, Palencia,
– «CAMPO GRANDE», Excmo. Ayuntamiento de Valladolid.
– «ROGELIO», lnstituto de Estudios Hispánicos, Barcelona. Editora COrr1.Trebolle, Orense.
– «SECANO», Editora Nacional, Madrid.
– «LAS COPLAS DEL BOTIJERO», Excmo. Ayuntamiento de la Ciudad de Dueñas.
– «EL GRITO», Ateneo de Valladolid, Colección Autores Vallisoletanos.,
– «CANTAR POR CANTAR», Excmo. Ayuntamiento de. Martorell.
– «MADRIGAL PARA UNA NIÑA NEGRA», Excmo. Ayuntamiento de Madrigal de la Altas Torres.
– «LA LUZ ENCERRADA», Colección «Rocamador», Palencia.
– «TONTO EL QUE LO LEA», Excmo. Ayuntamiento de Ceuta
– «NOTICIA DE UNA TRISTEZA», Premio del Círculo de Poetas y Escritores Iberoamericanos de Nueva York.
– «EL DÍA EN’ QUE ENTERRARON A ANTONIO ARANA», Ed. Rondas, Barcelona.
– «A LO MEJOR NINIEVA TODAVÍA», Tecnigraf, Venta de Baños (Palencia)
– «ARAMBOL’, Academia Castellana y Leonesa de la Poesía, Valladolid.
– «EN RESUMIDAS CUENTAS» , Fundación Jorge Guillén, Valladolid.
– «PÁRAMO» En resumidas cuentas (2.) Editorial Azul, Valladolid.
– «PLAZA DE LOS CIEGOS» En resumidas cuentas (3) Academia Castellana y Leonesa de la Poesía.
– «EN SEPTIEMBRE IRÉ A BÉJAR», Hojas del frío, Béjar.
– «PRESENCIA Y AUSENCIA DE FRANCISCO PINO», Editorial Azul, Valladolid,
– «DONDE DIOS», los últimos cuatro sonetos, Editorial Azul, Valladolid 2007.
– «LA ESCALERA EN EL AIRE Y CUENTOS SELECCIONADOS» editados por Editorial Azul 2009
– «LA ESCALERA EN EL AIRE», novela corta. Publicaciones de la Caja de Ahorros de Asturias.
– «TODAS LAS TARDES, EN GRANADA «, Hucha de Plata. Confederación Española de Cajas de Ahorro.
– «EL INCRÉDULO»
– «ESCÁNDALO EN EL PARVULARIO»
– «EL ASESINO DE CRISPÍN CRISANTO»
– «EL SECUESTRO»
– «EL ALIMAÑERO»
– «ESCALOFRÍO», Hucha de Plata. Confederación Española de Cajas de Ahorro.
– «LOS GITANOS»
– «VIZENZA», Obra Cultural del Banco de Bilbao. Viernes del Sarmiento.
– «LA VIRGEN NUEVA»
– «EL PERRO DE DON QUIJOTE»

 

Andrés Quintanilla Buey y Alfredo P. Alencart (julio 2007)

DISCURSOS DE INGRESO

 

– «JUGLAR DE FONTIVEROS», de la Academia de Juglares de San Juan de La Cruz, 1999. Editorial Azul.
– «DESDE EL JARDÍN», Academia de Historia y Bellas Artes de Burgos, colección Academos 2005.

 

Autoridades, familiares y amigos en la Plaza que lleva su nombre, en Toral de los Guzmanes

(J. Alencar)

 

TEATRO

 

– «EN LA PARDA TIERRA», Palencia, 1948.
– «EL ALCALDE», Burgos, Revista San Marcial, 1951.
– «LA MUERTE EN PRIMAVERA», Premio «Gonzalo Cantó», Alcoy, 1963.
– «FRÍO EN LAS MANOS», Grupo Palencia de Teatro. Casa de Cultura, Palencia.
– «EL ÚLTIMO ÁRBOL’, Certamen de Teatro Infantil, Lucena (Córdoba)
– «PAPÁ BOBY», Premio «Tomás Morales», Gran Canaria
– «LOS PÁJAROS MUERTOS», Compañía Pequeño Teatro de Barcelona. Festival de Teatro de Sitges Festivales de Molins del Rey
– «¿CULPABLES O INOCENTES?», teatro juvenil. Estudios de Radio Popular, Valladolid
– «HONORIO TROYANO», teatro breve juvenil.

 

 

Poetas de Valladolid en la Sala de la Palabra de Salamanca (2006, foto de J. Alencar)

EN RESUMIDAS CUENTAS

En el claroscuro de todo tiempo y de todo lugar relucen -para mí- los poemas y la vida de Andrés Quintanilla Buey. Yo, que soy todo lo que miro y siento, admiro la lámpara encendida que, sobre el cielo herido, nos dejó este hombre desde su ciudad electa, Valladolid. Y si alguna garantía tiene la realidad es que sé que lo volveré a ver en la hora de justicia. Por ello no me despido; nunca me despido de las personas que creyentemente quiero en este corazón mío que crece a cada verso. Andrés; don Andrés, no escuche las especificaciones de mi respeto: siéntalas calladamente hacia adentro, entrañadas al mecanismo salvador del Dios que nos provee sudario para el verano y ropa de gala para esa primavera del reencuentro, corriente arriba de la clorofila sagrada, del vino que la eternidad regala. Como a veces nos visita lo inaudito, Vsted no pasará de largo en mi lenguaje. Tampoco el tuétano de su ejemplo ante la gleba mendicante de abalorios y premiaciones. Tampoco los abrazos siempre en ristre, incontaminados, avivando el ánimo ante las patrañas. En resumidas cuentas, amigo Quintanilla -poeta de cielo y tierra, creyente de la resurrección- lo tengo junto a mí por los años de subsistencia que me restan, compartiendo agua de vida y su inmensa poesía: “Amor es lo que traigo y amor vengo a buscar”.

 

Alfredo Pérez Alencart (2005)

 

 

 

 

 

TRES MANUSCRITOS Y ORIGINALES